Varina dos Olhos Verdes
Júlio Vieitas
Nació el año 1915 en Valdas da Rainha y comenzó a cantar desde
muy joven, alternando su afición al fado con un trabajo en un comercio. A los
17 años cantaba en el “Retiro da Basalisa” participando también en verbenas y
sociedades recreativas.
Con
22 años, en 1937, pasó a la profesionalidad recorriendo con sus actuaciones
lugares que resumen el ambiente fadista de aquellos años: El café de Mondego en
primer lugar, más tarde el “Solar da Alegría”, café de la Vera Cruz, café
Latino. Actuó también en el café Luso, en la sala Júlia Mendes, el café
Monumental o la Cervecería Artística. Integrándose
en una compañía dirigida por Ercilia Costa, llegaría al cinema Olimpia de Porto
y diversos cafés, como volvería a hacer en Coimbra.
Tras
pasar por la radio en los años cincuenta y sesenta se asentaría como director
artístico en el café Arabita en los años setenta, donde concluiría su carrera
profesional en la que destacaría también como autor de varios fados bien
conocidos en su época, como el que presentamos a continuación.
Noite de São João, nunca esqueci
Ali à Madragoa, mesmo às Trinas
A noite era de sonho quando eu vi
A mais linda, entre as mais lindas varinas
Quando a Gracinda entrou no bailarico
O Chico p'ra alcançar singelo fim
Foi ofertar-lhe um cravo e um manjerico
Depois o Chico cantou-lhe assim
Tu que és graciosa e bela... tem cautela
Morena de entontecer
Varina dos olhos verdes... se te perdes
Por ti me quero perder
Vamos saltar á fogueira
Mas no calor da braseira ... vê lá, não caias
O amor por vezes inflama
Não vá o calor da chama... queimar-te as saias
Prossegue o bailarico a noite inteira
Entre alcachofras, cravos e balões
E foi talvez assim, desta maneira
Que um par uniu p'ra sempre os corações
Se acaso vejo às vezes, a Gracinda
Quando de rua em rua ela apregoa
Com imensa saudade eu lembro ainda
A noite linda da Madragoa
(Pulsar para ver el vídeo)
Noche de San Juan, nunca olvidé
Allí en Madragoa, incluso en Trinas
La noche era un sueño cuando vi
La más bella entre las más bellas pescaderas
Cuando Gracinda entró en el baile
El Chico para alcanzar un fin inocente
Fue a ofrecerle un clavel y una albahaca
Después el Chico le cantó así
Tú que eres graciosa y bella ... ten cuidado
Morena de marearte
Pescadera de ojos verdes ... si te pierdes
Por ti me quiero perder
Vamos a saltar la hoguera
Más en el calor de la brasa ... mira, no caigas
El amor a veces se inflama
No vaya el calor de la llama ... a quemarte las faldas
Prosigue el baile la noche entera
Entre alcachofas, claveles y globos
Y fue tal vez así, de esta manera
Que una pareja unió para siempre los corazones
Si acaso veo a veces, a Gracinda
Cuando de calle en calle ella pregona
Con gran saudade todavía recuerdo
La hermosa noche de Madragoa
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