domingo, 31 de enero de 2016

Chorai, fadistas, chorai

Antonio Rocha


El Fado Menor es una canción llena de melancolía, tristeza y saudade. El origen de la música que lo acompaña, apenas dos acordes repetidos sucesivamente, es popular, siendo quizá la primera forma que adoptó el fado en los barrios lisboetas donde nació. La letra de esta canción, de Linhares Barbosa, remite también al siglo XIX, cuando una cantante que ejercía la prostitución en las tabernas portuarias, María Severa (1820-1846), cantaba el fado por el barrio de Mouraria. Su fama se extendió por toda la ciudad. La tradición hace que tuviera amores con Francisco de Paula Portugal, conde de Vimioso, y que muriera asesinada.

Está interpretado por Antonio Rocha, nacido en Belém en 1938. Joven sin apenas estudios, cantaba ya a los 13 años participando en concursos de fados que le abrieron la puerta de las casas donde, de la mano de Deolinda Rodrigues, pasar a la profesionalidad a los 18 años. Desde entonces su labor fue reconocida en Portugal sin que tuviese la ambición de viajar fuera de las fronteras de su tierra.

Chorai, fadistas, chorai
Que a Severa já morreu
Fadistas como a Severa
Nunca o fado conheceu

Trinai, guitarras de pinho
Sinos nas torres, dobrai
Chorai, pedras do caminho
Chorai fadistas, chorai

Ponham em todas as velas
Cruzes viradas ao céu
Digam às próprias estrelas
Que a Severa já morreu

Viveu e amou em pecado
Mas sempre de alma sincera
Jamais cantarão o fado
Fadistas como a Severa

A desgraça foi a graça
Em que sempre se envolveu
Mas fadista de tal raça
Nunca o fado conheceu



(Pulsar para ver el vídeo) 


Llorad, fadistas, llorad
Que la Severa murió
Fadistas como la Severa
Nunca el fado conoció

Trinad, guitarras de pino
Campanas en las torres, doblad
Llorad, piedras del camino
Llorad, fadistas, llorad

Pongan en los velatorios
Cruces mirando al cielo
Digan a las mismas estrellas
Que la Severa murió

Vivió y amó en pecado
Mas siempre de alma sincera
Jamás cantarán el fado
Fadistas como la Severa

La desgracia fue la gracia
En que siempre se envolvió
Mas fadistas de esa raza
Nunca el fado conoció

viernes, 29 de enero de 2016

Garras dos Sentidos
Misia


 La revolución portuguesa llamada "de los claveles" en 1974 echó abajo la dictadura salazarista pero también rompió la implantación del fado. Tal como sucedió en la copla española a la muerte de Franco, el pueblo que deseaba renovación de la vida política y nuevas libertades asoció el fado a un régimen extinto que siempre lo había protegido y promocionado. Las casas de fados quedaron desiertas en muchos casos, bastantes de ellas tuvieron que cerrar. Los jóvenes que rondaban los veinte a treinta años volvieron la espalda al fado hasta el extremo de que la generación nacida entre 1950 y 1955 apenas produce algunos cantantes de relieve.

En este último año (1955) nace Misia en Porto, de padre portugués y madre catalana. Va con ella hasta la ciudad española desde pequeña y contempla, siendo su madre bailarina en "El Molino", todo el ambiente musical heteróclito del Paralelo. Es allí donde adquiere gusto por el fado pero enlazándolo con otras músicas.

A su vuelta a Portugal, muchos años después, no encontrará una buena acogida. Los puristas afirmarán que lo que hace no es fado y los que no lo son le darán la espalda al viejo fado. Como ella afirma:  "Sí. Tuvo una época de cierta desgracia, después de la Revolución de los Claveles y hasta los años noventa. Recuerdo que mi primer disco fue un fracaso comercial, tanto que el segundo tuve que sacarlo por mi cuenta. Esto ha cambiado, pero ha sido un proceso lento. El resurgimiento vino de afuera, con todo esto del auge de la world music. Ahora hay público, hay nuevas voces y se oye por todas partes".

Lentamente y apoyándose en un gran éxito conseguido en España, Francia o Alemania, Misia irá consiguiendo el reconocimiento en su tierra natal. Además de defender el fado tradicional cuando ningún joven lo hacía en Portugal, su mérito reside en abrir las puertas de este género musical hacia otras formas y maneras, incluyendo instrumentos inusuales (como el acordeón), que hicieron de la música portuguesa un género abierto a influencias y, por ello, mejor recibido en otros países.

Aquí la escuchamos en un Fado Menor, quizá el más popular de los fados, junto al Corrido y al de Mouraria. Letra de Augustina Bessa-Luis, apareció en un disco de 1999.


Não quero cantar amores,
Amores são passos perdidos.
São frios raios solares,
Verdes garras dos sentidos.

São cavalos corredores
Com asas de ferro e chumbo,
Caídos nas águas fundas.
Não quero cantar amores.

Paraísos proibidos,
Contentamentos injustos,
Feliz adversidade,
Amores são passos perdidos.

São demência dos olhares,
Alegre festa de pranto.
São furor obediente,
São frios raios solares.

Da má sorte defendidos
Os homens de bom juízo
Têm nas mãos prodigiosas
Verdes garras dos sentidos.
Não quero cantar amores
Nem falar dos seus motivos.



(Pulsar para ver el vídeo)


No quiero cantar amores,
amores son pasos perdidos.
Son fríos rayos solares,
verdes garras de sentidos.

Son caballos corredores
con alas de hierro y plomo,
caídos en aguas hondas,
no quiero cantar amores.

Paraísos prohibidos,
contentamientos injustos,
feliz adversidad,
amores son pasos perdidos.

Son demencia de las miradas,
alegre fiesta de llanto.
Son furor obediente,
son fríos rayos solares.

De mala suerte defendidos,
los hombres de buen juicio
tienen en manos inmensas
verdes garras de sentidos.

No quiero cantar amores
ni hablar de sus motivos.

miércoles, 27 de enero de 2016

Não passes com ela à minha rua
Fernanda María


Miguel Ramos (1901-1973) fue un guitarrista y creador de diversas piezas musicales que han quedado dentro del repertorio tradicional: el Fado Alberto, el Fado Margarida, el Fado Helena, etc. Tocó toda su vida profesional en casas de fados, particularmente en "A Tipóia", creada por Adelina Ramos (1916-2008), que no era pariente suya. La canción que presentamos, un Fado Alberto, siguió una letra de Carlos Conde y música suya, siendo primero interpretada por la dueña del restaurante. Sin embargo, fue Fernanda María (nacida en 1937) quien daría lugar a su mejor versión.
Esta cantante nació en Lisboa y siguió el "cursus honorum" típico de las cantantes de fados provenientes de clases humildes. A los doce años atendía las mesas en el "Adega Machado, luego en el "Parreirinha de Alfama" donde continuó con su gusto por el fado que escuchaba y que se atrevía a cantar de vez en cuando de forma aficionada.
Para triunfar, sin embargo, se podía hacer a partir de estas casas de fados o por los medios que en 1957, con veinte años, buscó: su participación en los programas radiofónicos de la Emisora Nacional. Contra la línea inaugurada por Amália Rodrigues años antes, no quiso viajar al extranjero, muy apegada como estaba a su vida familiar. Se contentó con actuar en casas de fados hasta abrir la suya propia (Lisboa á Noite) en 1964, a la muerte de su marido.


Ao fim de tantos anos de ser tua
Amaste outra, casaste, foste ingrato;
Vi-te passar com ela à minha rua
Abracei-me a chorar ao teu retrato
Vi-te passar com ela à minha rua
Abracei-me a chorar ao teu retrato

Podia insultar-te quando te vi
Ferida neste amor supremo e farto
Mas vinguei-me a chorar, chorei por ti
Por entre as persianas do meu quarto
Mas vinguei-me a chorar, chorei por ti
Por entre as persianas do meu quarto

Casaste! sê feliz, deus te proteja
Não te desejo mal, e tanto assim
Que não tenho ciúmes nem inveja
Como a tua mulher teve de mim
Que não tenho ciúmes nem inveja
Como a tua mulher teve de mim

Mas olha, meu amor, eu não me importa,
Antes que fosses dela eu já fui tua
Podes sempre bater à mina Porta
Mas não passes com ela à minha rua
Podes sempre bater à mina Porta
Mas não passes com ela à minha rua

(Pulsar para ver el vídeo)


Después de tantos años de ser tuya
Amaste a otra, te casaste, fuiste ingrato;
Te vi pasar con ella por mi calle
Me abracé a tu retrato llorando
Te vi pasar con ella por mi calle
Me abracé a tu retrato llorando

Podría haberte insultado cuando te vi
Herida en este amor grande y completo
Pero me vengué llorando, lloré por ti
Tras las persianas de mi cuarto
Pero me vengué llorando, lloré por ti
Tras las persianas de mi cuarto

¡Te casaste! sé feliz, Dios te proteja
No te deseo mal, ni tanto así
No tengo celos o envidia
Como tu mujer me tiene a mí
No tengo celos o envidia
Como tu mujer me tiene a mí

Pero mira, mi amor, si no te importa,
Antes de que fueses de ella yo fui tuya
Puedes siempre llamar a mi puerta
Pero no pases con ella por mi calle
Puedes siempre llamar a mi puerta
Pero no pases con ella por mi calle

lunes, 25 de enero de 2016

Venho de um Tempo
Hélder Moutinho


 Nacido en Oeiras, cerca de Lisboa, en 1969, Hélder Moutinho es tres años más joven que su hermano, el gran fadista conocido por el nombre de Camané. Viendo actuar a ambos es indudable la semejanza familiar en varios aspectos (particularmente la voz), pero también en la forma de entender la interpretación del fado tradicional. Hélder, además, es autor de muchas de sus canciones que aúnan letra y música de gran belleza.
No es habitual ver cantantes masculinos en el fado aunque ha habido grandes intérpretes (Marceneiro, Tony de Matos, José Afonso, Carlos de Carmo, entre los más antiguos). Actualmente, junto a la excelente voz de un joven Ricardo Ribeiro, quizá no las haya mejores que estos dos hermanos, Camané y Hélder Moutinho, que aún tienen un hermano más joven (Pedro Moutinho), buen cantante de fados, tal vez sin la brillantez de sus hermanos por ahora.

Venho de um tempo onde o tempo não havia
Quando o azul do céu não nos queimava
E a noite, antes de ser noite, era dia
E a tarde, antes de ser, nunca tardava

Venho de um tempo onde toda a solidão
Não se sabia meu amor, não se sabia
Era mais clara a cor agreste da paixão
E a desventura não havia, não havia

Tenho um poema que te quero revelar
Seara brava, lua cheia, quem me dera!
Breve novembro onde encontrei o teu olhar
Para me perder de uma só vez na primavera

Rasguei o medo de viver, rasguei a sorte
Provei o fel das minhas magoas e fracassos
Pedi à vida para viver até à morte
Pedi à morte para matar os meus cansaços

Não inventei de uma só vez esta distancia
Não entendi de uma só vez o entendimento
A nossa vida é muito mais que a nossa infância
A nossa morte é muito mais que o sofrimento

Tenho um poema que te quero revelar
Seara brava, lua cheia, quem me dera!
Breve novembro onde encontrei o teu olhar
Para me perder de uma só vez na primavera

Venho de um tempo, onde o tempo não havia?


(Pulsar para ver el vídeo)


Vengo de un tiempo donde el tiempo no existía
Cuando el azul del cielo no nos quemaba
Y la noche, antes de ser noche, era día
Y la tarde, antes de ser, nunca tardaba

Vengo de un tiempo en el que toda soledad
No se sabía, mi amor, no se sabía
Era más claro el color agreste de la pasión
Y la desventura no existía, no existía

Tengo un poema que te quiero revelar
Tierra inculta, luna llena, ¡quién me diera!
Breve noviembre, donde encontré tu mirada
Para perderme de golpe en la primavera

Rompí el miedo de vivir, rompí la suerte
Probé la hiel de mis penas y fracasos
Pedí a la vida vivir hasta la muerte
Pedí a la muerte matar mis cansancios

No inventé de una sola vez esta distancia
No entendí de una sola vez el entendimiento
Nuestra vida es mucho más que nuestra infancia
Nuestra muerte es mucho más que el sufrimiento

Tengo un poema que te quiero revelar
Tierra inculta, luna llena, ¡quién me diera!
Breve noviembre, donde encontré tu mirada
Para perderme de golpe en la primavera

¿Vengo de un tiempo donde el tiempo no existía?

lunes, 18 de enero de 2016

Porque Teimas Nesta Dor

Mafalda Taborda


Presentamos hoy a una cantante joven, ni siquiera ha cumplido treinta años puesto que nació en 1987. Poca información puedo dar puesto que aún no ha grabado ningún disco y sus actuaciones, con alguna en tierra española, se centran sobre todo en el "Fado en Chiado", espectáculo que se desarrolla en Lisboa todo el año con una actuación doble cada tarde.
Debo reconocer cierta debilidad personal por su forma de cantar, ya que pude asistir en Zamora en 2006 a la presentación de las "Nuevas Voces del Fado Antiguo", donde venía acompañada de la cantante Tania Oleiro y el guitarrista Carlos André, y la impresión fue muy positiva.
La canción, habitualmente cantada por Ana Moura, sigue el Fado Magala con letra del poeta José Luis Gordo, marido de María da Fé.


Por que teimas nesta dor
Por que não lhe queres dar fim
Tu sabes que o nosso amor
Não morre dentro de mim

Não te dou beijos fingidos
Que a boca sabe a verdade
Os teus lábios proibidos
Prende a minha alma à saudade

Mesmo que ao beijar não sintas
O que a tua boca diz
Meu amor, por mais que mintas
Nos teus beijos sou feliz

Meu amor na tua boca
Há um silêncio que é nosso
Um travo de coisa pouca
E amar-te mais eu não posso


 Porque Teimas Nesta Dor, por Mafalda Taborda

(Pulsar para ver el vídeo)



Por qué insistes en este dolor
Por qué no le quieres dar fin
Tú sabes que nuestro amor
No muere dentro de mí

No te doy besos fingidos
Que la boca sabe la verdad
Tus labios prohibidos
Enlazan mi alma a la nostalgia

Incluso si al besar no sientes
Lo que tu boca dice
Mi amor, por más que mientas
En tus besos soy feliz

Mi amor en tu boca
Hay un silencio que es nuestro
Un amargor de algo escaso
Y más no puedo amarte

sábado, 16 de enero de 2016

O vento

Teresa Siqueira


Ya que hemos mencionado la espléndida y prometedora carrera de Carminho, vamos a recordar a su madre Teresa Siqueira. Acaba de sobrepasar los sesenta años, proviene de una familia aristocrática. Su dedicación al fado fue tardía, tenía ya cuarenta años cuando se presentó en público, de hecho su primera grabación es de 1998, cuando contaba 45 años.
La presentamos en un concierto interpretando "O vento", que es un Fado Magala, música obra de José Carlos Gomes que ha dado nombre a uno de las casi doscientas canciones que componen el acervo tradicional del fado. La letra es de María da Graça Ferrão. Carminho tendría un gran parecido físico con su madre pero, en mi opinión, mejor voz y capacidad de interpretación. Compararemos la forma de cantar de ésta con la de otra aristócrata del fado que ya conocemos en este blog.

Se o vento soubesse ler
Leria em meu pensamento
A loucura de te ver
A toda a hora e momento

Dizer-te aquilo que sinto
Não sei se parece mal
Diz que sim, não te desminto
O que sou eu afinal

A brisa quando ao passar
Murmura entre a folhagem
Palavras para te adorar
Carinhos à tua imagem

Ouve esta frase sentida
Sem amor não há viver
Amar é próprio da vida
Ai se o vento soubesse ler



(Pulsar para ver el vídeo)



Si el viento supiese leer
Leería en mi pensamiento
La locura de verte
A toda hora y momento

Decirte aquello que siento
No sé si parece mal
Di que sí, no te desmiento
Lo que soy yo, al final

La brisa cuando al pasar
Murmura entre el follaje
Palabras para adorarte
Cariños a tu imagen

Oye esta frase sentida
Sin amor no hay vida
Amar es propio de la vida
Ay si el viento supiese leer

viernes, 15 de enero de 2016

Disse-te Adeus
Carminho


Carminho tiene actualmente 31 años. Forma parte de una generación que ronda esa edad, con Cuca Roseta y Ricardo Ribeiro de 34 años o Gisela João de 32, entre otros. Educada al calor de la música por su madre Teresa Siqueira, conocida fadista, intervino en las casas de fados desde pequeña. Se tomó un respiro de varios años en su juventud conociendo mundo a través de misiones humanitarias para volver y triunfar con tres espléndidos álbumes: "Fado" (2009), "Alma" (2012) y "Canto" (2014). Siempre fiel a los fados tradicionales sin renunciar a aspectos más personales por influencia de otras músicas portuguesas y brasileñas, Carminho, en entrevista muy reciente, afirma:

"Es una interpretación de las cosas sencillas del mundo, de la naturaleza, de las personas, de los amores, de las 'saudades", señala Carminho, y se lanza a explicar que se trata de una palabra sin traducción. "No es morriña, no es nostalgia, es la falta de algo que no sabes qué es, que no has conocido y que sabes que no va a volver, a veces es pesada, a veces es suave... El fado fue a dar con la única palabra que no se traduce, para que nadie sepa explicarlo".

En esta canción escuchamos, como en el ejemplo de Fernando Mauricio, el Fado Marcha de Raul Pinto.

Disse-te adeus, não me lembro
Em que dia de Setembro
Só sei que era madrugada;
A rua estava deserta
E até a lua discreta
Fingiu que não deu por nada.

Sorrimos à despedida
Como quem sabe que a vida
É nome que a morte tem
Nunca mais nos encontramos
E nunca mais perguntamos
Um p?lo outro, a ninguém.

Que memória ou que saudade
Contará toda a história
De que não fomos capazes
Por saudade ou por memória
Eu só sei contar a história
Da falta que tu fazes.



(Pulsar para ver el vídeo)


Te dije adiós, no me acuerdo
En qué día de septiembre
Sólo sé que era madrugada;
La calle estaba desierta
Y hasta la luna discreta
Fingió que no notó nada.

Sonreímos en la despedida
Como quien sabe que la vida
Es el nombre que la muerte tiene
Nunca más nos encontramos
Y nunca más preguntamos
El uno por el otro, a nadie.

Qué memoria o qué nostalgia
Contará toda la historia
De que no fuimos capaces
Por nostalgia o por memoria
Sólo sé contar la historia
De la falta que me haces